Piedra filosofal

¡Hola a todos! ¿Como están? Bueno aquí estoy una vez más con la sección de hoy. Hoy será común y corriente y hablaré de una frase que me pareció muy interesante…

“La alegría es piedra filosofal que todo lo convierte en oro” – Benjamin Franklin

¡Wow, nada más cierto que esto! Todos siempre buscamos eso. Una piedra filosofal que convierta todo en oro. Que lo malo sea bueno, que la escasez se vuelva abundancia… Bueno, al parecer, según Franklin, la tenemos al alcance. Mucho más que eso, la tenemos enfrente de nuestros ojos.

Y no es como que se hará una gran búsqueda por la piedra y habrá una pelea para decir quién se queda con ella… Porque  ABSOLUTAMENTE TODOS pueden encontrarla. ¿Por qué? Porque es tan simple con ser felices, sentir alegría…

Y, ¿Cómo haría la alegría para convertir todo en oro? Bueno, claramente no es algo literal.  Una sonrisa no nos traerá 3 quilates de oro. Pero nos traerá mucho más. Una sonrisa, una alegría puedo convertir los momentos más tristes, los pensamientos más oscuros, las peores miserias en algo bueno. Y eso es mucho más que oro. Lo importante es no cohibirse, y dejar que la alegría recorra cada una de nuestras venas. Dejar que la felicidad nos invada. Y por si solos, los problemas irán desapareciendo, volviéndose más pequeños.

Cuando nos sintamos tristes y perdidos, solo basta recordar que con alegría vamos a poder llegar muy, MUY lejos. Porque eso es alegría, es saber que siempre hay un camino hacia delante, es dejar atrás los miedos para perseguir los sueños. Es no dejar que nada te importe, es ser invencible es RESISTIR. Es resistir  a los insultos, a las críticas a los obstáculos, es resistir a cada cosa que se nos oponga en el camino.

Y para encontrar esta piedra, quizás habrá que hacer una búsqueda. Una búsqueda interna. Una búsqueda en uno mismo. Porque por más sencillo que parezca, no es fácil aprender a usar la alegría como herramienta. Y podemos demorar un día o incluso toda la vida buscando esa piedra dentro de nosotros. Pero eso no es importante, porque al haberla encontrado nos daremos cuenta de que todo valió la pena.

Así que queridos, espero que busquen esa piedra. Que no está en otro lugar más que en ustedes. ¡Suerte! Hasta la próxima.

-Alegría.